Tal como quedamos hace una semana, Brita volvió a llamar. Sabía que lo haría. Demasiado tentador para una nórdica, por mucho y bien que nos conozca, dejar pasar una ocasión como esta de meter el dedo en el ojo (con todo cariño, desde luego).
No se reía, pero el tono era jocoso. No
hizo ningún comentario, pero esperaba ansiosa los míos. La conversación, más o
menos fue así:
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Hola
Jaime, ya pasó el sábado 13.¡¡Por fin la normalidad!!
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Siento
contradecirte Brita, pero lo que veo en las redes sociales y en la prensa no
parece que sea muy normal.
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¿A
qué te refieres? ¿No se ha desarrollado todo desde los más estrictos principios
democráticos?- Creo que en ese momento se le escapo una apenas perceptible
risita.
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Partiendo
de la base de que nuestra Ley Electoral está caduca y de que nuestros políticos
de nuevo cuño tienen de todo menos preparación para asumir estas
responsabilidades, te diré que en esto de los pactos ha habido tanta variedad,
tanta mezcla, tanto disparate que, por fuerza, será cuestión de tiempo, no
mucho, que empiecen a tirarse los tratos a la cabeza.
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Me
sorprendes. Está claro que no te ha gustado.
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Es
cierto, no veo ninguna lógica. En un sitio vale una cosa y en de al lado la
contraria. Las alianzas en muchos casos, solo tiene el objetivo de desalojar,
precisamente, al partido más votado, al que han apoyado más ciudadanos.
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Bueno,
pero si sumas los tres, cuatro o cinco que se alían son más y eso es
democracia.
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¿Me
quieres decir que esos tres, cuatro o cinco partidos llevaban el mismo programa?
¿las mismas propuestas? ¿la misma ideología? ¿similares candidatos?
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Hombre
eso no. Son distintos.
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Entonces,
si son distintos ¿Qué programa van a
seguir?
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Pues
una mezcla.- Me dice sin evitar una sonora carcajada.
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Vale.
Tú lo has dicho. Una mezcla, de tres, cuatro a cinco. Quedamos para dentro de
unos meses, no muchos. Quizás antes de las generales. Ya te contaré.
Estás en lo cierto, Jaime. Yo no creo que haya que esperar tanto. Ya antes de las generales veremos cosas como los mismos que antes apoyaban presentando moción de censura y cosas así...
ResponderEliminarBienvenida Brita de nuevo, aunque creo que ya ha empezado a conocernos y en vez de sorprenderse de nuestras cosas, se ríe. Yo también si pudiera.
ResponderEliminarUn abrazo