sábado, 7 de diciembre de 2013

SINDICATOS Y TRANSPARENCIA

Publicado en el Diario de Cádiz el sábado 07 de diciembre de 2013
      
          
NUNCA es tarde… y aunque debería existir desde hace mucho tiempo, por fin parece que va a entrar en vigor una Ley de Transparencia que pretende poner freno a tantísimos casos de corrupción como se están descubriendo en España, un día sí y otro también.

La Ley será manifiestamente mejorable, con toda seguridad, como todas. La experiencia, una vez entre en vigor, dará las pautas para su mejora, pero aun imperfecta, no puede esperarse más. La situación de la corrupción en nuestro país nos sitúa a niveles tercermundistas. Parece que no existieran leyes morales que pusieran límites a tanta estafa, robo, corrupción; o muchos políticos, banqueros, empresarios y sindicalistas ignoran absolutamente el significado de palabras como ética, honradez, solidaridad…

En los inicios de la tramitación de la Ley de Transparencia todos los partidos se apresuraron a incluir a la Casa Real y a la Iglesia Católica con mucho interés, como si ambas fueran las mayores defraudadoras de España, quizás motivados por el caso Urdangarín y una recurrente manía persecutoria hacia la institución que más ayuda a los necesitados en todo el mundo.

Curiosamente, los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, con la misma rapidez que pedían la fiscalización de la Casa Real y la Iglesia, se negaban a ser incluidos como objetivos de la fiscalización de sus cuentas que la nueva Ley impone. Los demás sí, pero ellos no.

Piden, con todo derecho, la publicación del destino de los dineros públicos, sea quien sea su administrador, pero para nada hacer públicos los sueldos de sus dirigentes, liberados y empleados.

Como la crisis económica no perdona, la UGT, ha tenido que hacer un ERE en Madrid, Aragón, Andalucía y otras comunidades que afectan a casi el sesenta por ciento de sus empleados, con las condiciones, tan criticadas por sus dirigentes, de la nueva Ley de la Reforma Laboral del PP.

Aunque no todos los ERE han prosperado, muchos empleados de UGT han pasado a las listas del paro e inmediatamente se han producido las denuncias por corrupción, de estos desempleados a sus antiguos dirigentes, algunos de los cuales ya han dimitido de sus cargos.

Por algo no querían que les afectara la Ley de Transparencia, ellos querían la Ley del Embudo
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario