Me crucé con ellos, madre e hijo, en una de las anchas aceras de la Avenida de Andalucía. El niño, de unos ocho años, terminaba de comerse un paquete de chuhes y tal como acabó tiró la bolsa al suelo. La distancia a la papelera más próxima (casualmente, porque se echan de menos en muchos sitios) no llegaba a tres metros. Me atreví a decirle a la criatura: “Se te ha caído la bolsa” (lo hago así para darle una salida airosa). La madre no tardó nada en contestarme: “No se le ha caído, la ha tirado, para eso pago mis impuestos”
Por desgracia no es un caso aislado.
Veo a padres en supermercados consentir a sus hijos coger lo que les apetece,
abrirlo y volverlo a dejar, o comer hasta donde les da la gana y dejarlo luego,
sin recibir de sus padres, que lo ven, ninguna corrección.
Se habla mucho de que ha “progresado”
la suciedad en ciudades donde hace más de un año han entrado gobiernos
“progresistas” y es cierto, por lo menos Madrid y Cádiz que he podido observar
directamente. De modo que no es la falta de lluvia (como decía el concejal
gaditano), sino la falta de limpieza por parte de los servicios
correspondientes. Esa sería la culpable del cincuenta por ciento, junto con la
falta de papeleras grandes y bien instaladas por toda la ciudad
Pero del otro cincuenta por ciento, los
culpables son esas madres y padres, mal educados ellos, incapaces, por tanto,
de educar a sus hijos. Esos adolescentes y jóvenes que salen del colegio,
montan en el autobús y corren a ocupar los asientos vacíos, sin cederlos jamás
a personas mayores e incluso impedidas y sin que los conductores se lo
recriminen o les obliguen a dejar los reservados para estas personas.
Hay una falta evidente de vigilancia, tanto
de día como de noche (Ay de aquellos serenos y vigilantes de jardines !!!),
gracias a esta ausencia de vigilancia quedan restos de botellones, los dueños
de los perros no se ocupan de recoger los excrementos de sus mascotas ni echan
agua que elimine desagradables olores, la ciudad parece una inmensa pared para
las pintadas, mobiliario urbano roto….¿No se ahorraría dinero mediante el
refuerzo de la vigilancia e instalación de cámaras?
Muy bueno tu artículo y es una verdad como un templo.
ResponderEliminarUn abrazo amigo Jaime. Miguel
MUY, MUY BUENO.
ResponderEliminarUn abrazo
SALVADOR
Es tan buena idea, que yo creo que darían resultado incluso poniendo algunas verdaderas y muchas 'falsas' e indicando que hay cámaras instaladas anti vandalismo o algo así > VIVAN TUS NEURONAS!!!! Otro abrazo desde Grazalema. Paco
ResponderEliminarEl drama de España es la mala educación. Ahí radica todo lo demás. Enhorabuena Jaime. Un abrazo. RM
ResponderEliminarTienes toda la razón Raul. Ese es el primero y más importante problema y por esa razón los nacionalistas han luchado hasta conseguirlo, por hacerse con esa parcela tan importante en los gobiernos. Ahora estamos pagando las consecuencias de tanto buenismo y dejar hacer. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarEnrique dijo:
ResponderEliminarQuizás no es que sea mala la educación que se imparte, pues a mí me parece que es la ausencia total de educación. Hoy no se educa a los jóvenes, a los que por cierto, se les consiente casi todo. Así nos va. Un abrazo Jaime
Muy bueno
ResponderEliminarEn América latina ocurre lo mismo!!!, solo que los padres tampoco pagan impuestos!!!
Saludos
Carlos
Jaime, no tengo palabras para darte la razon. Has dado en el clavo. Un abrazo
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