sábado, 22 de junio de 2013

OBAMA Y LAS ESCUCHAS

Publicado en el Diario de Cádiz el sábado  22 de Junio de 2013



HA sido portada de los periódicos y noticia de apertura de los telediarios de todo el mundo: "EEUU (su Gobierno), accede a los servidores de Microsoft, Google, Apple, Facebook, y Yahoo para obtener información de sus usuarios". The Guardian y The Washington Post publicaron la información facilitada por Edward Snowden, antiguo técnico de la CIA y consultor de la Agencia Nacional de Inteligencia, desde su voluntario exilio de Hong Kong. La Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera, conocida como Ley FISA, data de 1978 y pretende "espiar a extranjeros sospechosos de terrorismo", pero el mero hecho de que un sospechoso conecte telefónicamente, por Internet o cualquier otro medio telemático con un norteamericano, convierte a éste en un posible sospechoso de terrorismo.

El sistema no graba las conversaciones, solamente (que no es poco), facilita la identidad de los comunicantes y establece así un racimo de posibles sospechosos de terrorismo, nacionales o extranjeros, cuya única culpa, por el momento, es la de establecer contacto con otro sospechoso. Snowden, acusado de haber filtrado información clasificada como "alto secreto", busca asilo político para eludir las gravísimas consecuencias penales de su delito. Dice no arrepentirse de lo hecho y que de esta forma, sus compatriotas podrán decidir hasta donde quieren ceder su privacidad.

Obama declaró que no se puede tener seguridad al cien por cien, junto con privacidad al cien por cien. Es uno de los dilemas no resueltos por el sistema democrático. No puede garantizarse la seguridad de los ciudadanos sin que estos pierdan a su vez (cedan de buena o mala gana) una parte más o menos importante de su privacidad, en función de la gravedad e inminencia de un ataque terrorista. Las autoridades norteamericanas declaran que gracias al sistema se ha evitado, entre muchos otros, un atentado en Wall Street. En España, se han producido más de quinientas detenciones de sospechosos de terrorismo yihadista.

Para entender a quienes son detractores, o a los que defienden las escuchas, pongámonos alternativamente en los zapatos de quienes son controlados o en los de las posibles víctimas de un atentado terrorista.

2 comentarios:

  1. No cabe duda que el saber(que,cuando,como y quien) tanto en acciones de guerra, como en acciones antiterrorista es de vital importancia,por lo tanto creo que debe primar el SABER(aunque sea a costa de vulnerar la intimidad de las personas),para asi poder dar una respuesta adecuada a la amenaza.
    El unico pero que pongo a este razonamiento es: que la honradez personal y profesional de las personas encargadas de conseguir y custodiar esta información debe estar fuera de toda duda,cosa que no ha pasado con el exagente de la CIA tan en las noticias estos dias.

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    1. Querido amigo, lector y seguidor de este blog, no es un "pero" es sencillamente imprescindible y exigible moral y legalmente (castigado con penas muy importantes de las que trata de escapar el traidor Snowden)que las personas encargadas de esos trabajos sean honradas. Lo que ocurre es que a veces el dinero, las ansias de notoriedad o vaya Vd. a saber que motivaciones, impulsan a gente sin scrupulos a desvelar o hacer uso de lo que para ellos deberia ser un secreto.
      Como se dice en estos casos: "las personas más limpias para los trabajos más sucios", aunque yo matizaria lo de sucio y lo sustituiria por "discreto, delicado, importante, dificil,...".

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