El
martes 30 de Junio de 2009, hace casi 4 años, publiqué en estas mismas páginas,
en la desaparecida “Firma Invitada”, la primera parte de este artículo. Podría reproducirlo
íntegramente porque no ha perdido ni un ápice de actualidad, pero me limitaré a
recordar solo algunas frases.
El
debate y las protestas de estos días sobre la nueva Ley Orgánica de Mejora de
la Calidad Educativa (LOMCE), me sugieren una reflexión previa: Seis leyes de
educación, que se dice pronto, todas ellas elaboradas por gobiernos socialistas,
nos han llevado año tras año a ocupar los últimos lugares de las naciones
desarrolladas en materia educativa, incluidas nuestras numerosísimas universidades,
ninguna de las cuales está entre las 200 primeras del mundo.
Decía
en 2009 que la culpa de esta situación es plural porque la sociedad española,
sus representantes políticos, han sido incapaces en 30 años de llegar a un
“Pacto para la Educación” y, lo peor es
que estos políticos nunca llegarán a ponerse de acuerdo, ni en esto ni en nada.
El bien común está por detrás de los intereses partidistas.
Acabo
de oírle al Embajador Francisco Vázquez, socialista y católico, como le gusta
definirse, en una conferencia a sala repleta en Jerez, que el mayor fracaso de
esta democracia, devenida en partitocracia, ha sido el sistema educativo.
De
este tremendo fracaso han derivado temas tan graves como los sentimientos separatistas entre los jóvenes catalanes y
vascos, sometidos durante muchos años a un adoctrinamiento sistemático en
contra de España.
Citaba
el Embajador Vázquez ejemplos ridículos vividos por él en su Galicia natal,
como el estudio exclusivamente de autores gallegos que escribían en su lengua, mientras se ignoraba a Rosalía de Castro,
Pardo Bazán o Valle Inclán, porque parte de su obra está escrita en
castellano. Y no digamos nada de la
Historia y hasta de la Geografía localista que ignora el nacimiento de los ríos
propios, si provienen de otra región.
Tema
crucial y determinante que nuestros políticos son incapaces de acordar,
enfrascados, como están, en luchas internas y de partido en permanente campaña
electoral.
Desde luego es un tema importantísimo el de la educación, y un error cambiar continuamente las leyes educativas.
ResponderEliminarMientras al político le interese mas su partido y la butaca que ocupa que la población general nos irá mal a la ciudadanía.
Como decía el pasado domingo Alfonso Osorio (vicepresidente del primer gobierno de Suarez): "Al diputado español el electorado le importa un bledo , el que le importa es el mandamás de su partido".
Algún modo habrá que buscar para que estos políticos que tenemos pongan los pies en el suelo y se ocupen de aquellos asuntos para los que fueron votados.